Cuando se conduce una furgoneta surgen diferentes situaciones que puedan perjudicar gravemente la carga, como pueden ser los frenazos, aceleraciones, maniobras bruscas o incluso las condiciones de la propia carretera. Es por eso que llevar la carga bien organizada es importante tanto para la seguridad del vehículo como la de los pasajeros. Además, tener la carga de forma ordenada ayuda a tener organizados los materiales y herramientas.
Existen muchos métodos para sujetar la carga en una furgoneta. Según qué tipo y tamaño de carga tenemos que transportar podremos elegir un método u otro. Un método bastante frecuente para la sujeción de carga en una furgoneta es el de usar barras horizontales o verticales.
Las barras verticales y horizontales evitan que la carga se desplace por la furgoneta y, por tanto, hacen que el interior de la furgoneta esté más protegido. Las cinchas de amarre o eslingas ayudan a que la carga este bien amarrada.
El separador de carga también cumple una función parecida. Las rejillas separadoras evitan desplazamientos de la carga y separan la parte entre los pasajeros y la carga. Esto hace que, por ejemplo, a la hora de llevar un perro en la parte trasera de la furgoneta no tenga por que interferir en la conducción del conductor. Dando así una seguridad mayor al conductor.
Que el suelo del vehículo sea antideslizante, evidentemente, también ayudará a que la carga no se deslice por el interior del vehículo. Otro de los muchos tipos de métodos que hay para llevar la carga, pero en este caso en el exterior del vehículo, puede ser el de utilizar cofres y bacas para furgonetas. En este caso, la carga se lleva en el techo del vehículo.
Además de que los suelos para furgonetas puedan ayudar a que la carga no se desplace por la furgoneta, protegiendo la furgoneta de daños, panelar la furgoneta también ayuda a que la furgoneta no sea dañada.